Tenemos una versión de PC bastante exigente y para la que se necesita un equipo de gama media-alta para sacar el máximo rendimiento. Pero dentro de esa orquilla, el resultado es muy bueno. Al igual que sucediera con la segunda parte de Assasin's Creed en PC, a este título le favorece mucho el extra de resolución y antialising, que dejan brillar con más intensidad el notable trabajo en la recreación de escenarios. A eso hay que añadir una tasa de frames superior que da a las ricas animaciones un extra de fluidez, lo que se traduce en una mayor espectacularidad visual en las secuencias de acción y en el movimiento de los asesinos por la ciudad eterna.
El mundo creado por Ubisoft cuenta la historia de dos organizaciones, los asesinos y los templarios, enfrentados desde hace siglos. En la época actual sigue la lucha –inexistente para la mayoría de ciudadanos- para el dominio mundial. Bajo esta premisa, Desmond Miles viaja Animus mediante por épocas pasadas para preparar el terreno que permita a los asesinos acabar con las intenciones de sus enemigos. Así se narraba en Assassin’s Creed y así seguía en la segunda parte. Primero ambientado en la época de las cruzadas con Altair como protagonista recordado por Miles. Luego se pasó al renacimiento, a finales de 1.400 en Italia. Ezio Auditore era el nuevo descendiente.
Brotherhood es una secuela directa no sólo en lo que Desmond Mile se refiere, sino también en los acontecimientos renacentistas protagonizados por Ezio. Nuestra trama empieza inmediatamente después de acabar Assassin’s Creed II. El italiano asesino escapa del último emplazamiento en el que solventa, o eso cree, el conflicto con los Borgia. Por desgracia para sus más allegados, tanto familiares como Maquiavelo, las cosas no son como esperaban. Ezio les anuncia que no ha acabado con Borgia, pero que tampoco era necesario hacerlo. Las dudas que asaltan a los interlocutores del asesino no son gratuitas, ya que como se comprobará poco después se cometió un error fatal al no acabar con la vida de su principal enemigo.